Problemas tras la última actualización de Android TV: lentitud y opiniones divididas

Actualización de Android TV

En los últimos meses, la llegada de nuevas versiones de Android TV ha hecho que muchas personas vean modificada la experiencia con su Smart TV. Si bien algunos cambios en el diseño e interfaz resultan atractivos visualmente, es frecuente que la actualización tenga un coste en cuanto a fluidez y rendimiento general, algo que ha sido centro de debate entre los usuarios.

La situación se ha hecho notar especialmente entre quienes poseen televisores con Android TV de marcas como TCL. Tras recibir la actualización, numerosas voces han compartido su malestar ante el notable descenso en la velocidad y la respuesta del sistema, llegando incluso a sentirse como si estuvieran usando un modelo de gama más baja, pese a haber invertido en equipos que, en su momento, se situaban entre lo más avanzado del mercado.

Lentitud y menor rendimiento tras actualizar Android TV

Actualización de sistema Android TV

Entre las quejas más habituales tras instalar la última versión, la lentitud a la hora de desplazarse entre menús o iniciar aplicaciones se ha convertido en algo recurrente. Usuarios relatan que acciones tan básicas como cambiar ajustes de imagen o moverse entre apps presentan retardos que antes no existían. Incluso después de intentar optimizar manualmente el televisor, por ejemplo desinstalando apps innecesarias o cambiando configuraciones, muchos advierten que no han conseguido una mejora significativa.

Este fenómeno también se refleja en plataformas de opiniones como Trustpilot, donde televisores de firmas populares acumulan decenas de reseñas altamente negativas tras recibir actualizaciones importantes. Hay quien ha optado por utilizar dispositivos externos, como Fire TV o Chromecast, para conseguir una experiencia más ágil. No es raro encontrar comentarios que destacan que «lo barato sale caro», refiriéndose al deterioro prematuro que notan algunos usuarios tras cada nueva versión del sistema operativo.

¿Actualizar o no? La importancia de informarse antes de instalar

Las actualizaciones de Android TV, aunque pensadas para mejorar estabilidad y añadir funciones, pueden provocar el efecto contrario en modelos que aún no están optimizados para las últimas versiones. Algunos consumidores recomiendan desactivar la actualización automática, especialmente si el televisor funciona correctamente y no muestra problemas previos.

En muchos grupos y foros se ha convertido en una práctica habitual consultar experiencias de otros usuarios antes de instalar una nueva versión del sistema. Así, si la nueva actualización implica pérdida de prestaciones, existe la opción de dejar el sistema como está y evitar futuros quebraderos de cabeza. Para mejorar la experiencia, también es recomendable revisar trucos para mejorar el rendimiento de Android TV.

También se plantea la necesidad de que los fabricantes permitan a los usuarios revertir la actualización si detectan que la experiencia empeora de manera significativa, incluso a costa de renunciar a novedades de seguridad o funciones recientes. Hay voces que defienden que actualizar solo tendría sentido si no se penaliza el rendimiento o si realmente se solucionan problemas importantes.

La experiencia de usuario y las valoraciones tras actualizar

El gran volumen de opiniones negativas tras la última actualización de Android TV no es exclusivo de una sola marca. Aunque los modelos de TCL concentran buena parte de las quejas por bajo rendimiento, la inquietud se extiende entre usuarios de otros fabricantes con sistema Android TV que han visto cómo su dispositivo disminuye la velocidad con cada nueva versión.

Buena parte del descontento se relaciona con apagones espontáneos, lentitud al ejecutar aplicaciones y bloqueos en la interfaz. En casos extremos, algunos clientes han llegado a devolver el televisor y optar por marcas consideradas más fiables, aunque eso suponga un mayor desembolso inicial. Por otro lado, no faltan quienes, satisfechos al principio, actualizan sus reseñas meses después al comprobar que la experiencia ha dejado de ser positiva.

Las valoraciones y las experiencias compartidas en redes sociales y foros especializados refuerzan la percepción de que, cuando todo funciona correctamente, lo más sensato es sopesar bien si conviene instalar la próxima actualización de Android TV. Y, sobre todo, estar atentos a las primeras impresiones de otros usuarios para evitar sorpresas desagradables.

Es importante considerar que, aunque las actualizaciones de Android TV pueden aportar mejoras visuales y funcionales, también entrañan riesgos para el rendimiento en determinados modelos. Cada usuario debe valorar detenidamente cuándo merece la pena actualizar, informarse sobre las experiencias recientes y, si el sistema responde bien, plantearse si realmente necesita las últimas novedades. Así, se reducen las posibilidades de encontrarse con una tele mucho menos ágil de lo esperado tras la actualización.