La imagen de un robot humanoide encargándose de las tareas domésticas ha dejado de ser ciencia ficción para convertirse en un objetivo real de la tecnología actual. Las empresas del sector apuestan fuerte por productos capaces de asumir labores rutinarias en el hogar, gracias a los avances en inteligencia artificial y robótica, y los prototipos más recientes ya muestran una sorprendente capacidad para interactuar con personas y su entorno.
La presencia de robots humanoides en el hogar supone un nuevo paso en la automatización de la vida diaria, permitiendo liberar tiempo para quienes buscan una mayor comodidad en la gestión de las tareas cotidianas. Son máquinas que incorporan sistemas de visión, lenguaje y acción, y pueden comprender y ejecutar órdenes verbales sencillas o complejas, adaptándose a distintos escenarios domésticos.
Helix y Figure 02: la nueva generación de robots domésticos
Uno de los modelos más sonados es Figure 02, desarrollado por la empresa californiana Figure. Este robot, con 1,67 metros de altura y solo 20 kilos de peso, es capaz de levantar cargas de hasta 70 kilos y manipular objetos domésticos con soltura. Gracias a su software de inteligencia artificial, puede recibir instrucciones tanto habladas como escritas para realizar acciones como cargar una lavadora, servir líquidos, regar plantas o colocar objetos en su sitio.
El corazón de sus funciones lo aporta el sistema Helix, una IA que combina visión artificial, comprensión del lenguaje y control de movimientos. Esto permite al robot adaptarse incluso a situaciones no previstas o manipular objetos desconocidos sin entrenamiento previo. Además, Helix facilita la colaboración entre dos robots para realizar juntas tareas más complejas, como organizar estancias o mover objetos voluminosos.
El objetivo de Figure es desarrollar robots domésticos multifuncionales que puedan convivir de forma natural con las personas. Si bien las primeras aplicaciones de la compañía han estado más enfocadas al ámbito industrial con colaboraciones como la de BMW, los últimos ensayos demuestran una clara apuesta por el hogar inteligente y automatizado. El CEO de la firma, Brett Adcock, incluso ha compartido vídeos de su propio robot cargando la colada en casa.
HIVA Haiwa: funcionalidad y versatilidad en el hogar
Desde Asia también llegan propuestas llamativas como HIVA Haiwa, fruto de la colaboración entre la empresa china Haier y Star Era Technology Co. Este robot humanoide mide 1,65 metros, pesa 70 kilos y utiliza una base con ruedas para moverse, acercando su diseño al de los robots aspiradores pero con un cuerpo más similar al humano.
HIVA Haiwa ha sido creado para realizar tareas como aspirar, planchar, poner lavadoras y recoger objetos, además de ejecutar comandos de voz o instrucciones a distancia. Aunque por ahora necesita indicaciones humanas para cada tarea, sus desarrolladores trabajan en sistemas de aprendizaje por imitación que permitirán al robot aprender nuevas acciones viendo cómo lo hacen las personas. Además, se espera que su repertorio se amplíe con funciones como cocinar, fregar suelos o doblar ropa.
Ambas propuestas reflejan una tendencia clara hacia la integración de robots humanoides en los hogares, ya sea para tareas específicas o como asistentes domésticos completos. La efectividad y adopción final dependerá en gran medida de la evolución tecnológica y del coste que suponga para los usuarios.
Retos y futuro de los robots domésticos
El progreso en inteligencia artificial avanzada y la optimización del hardware han permitido que estos robots funcionen con componentes energéticamente eficientes, facilitando su expansión desde el entorno industrial hasta la vivienda particular. Gracias a sistemas que generalizan comportamientos sin requerir entrenamiento manual intensivo, el aprendizaje y la adaptación a nuevas rutinas domésticas es cada vez más rápido y económico.
Las empresas del sector también tratan de mantener el precio bajo control para que los robots domésticos sean accesibles y no requieran inversiones prohibitivas en hardware. Por ahora, muchos modelos siguen en fase de pruebas o reserva, pero su inminente aparición en el mercado de consumo parece solo una cuestión de tiempo.
Este avance evidencia una tendencia hacia la robótica humanoide que podría transformar significativamente la forma en que las personas interactúan con la tecnología en sus hogares, haciendo la vida diaria más cómoda y eficiente, gracias a capacidades que se perfeccionan constantemente y que prometen una mayor integración en el futuro cercano.