La nueva etapa de Alexa llega marcada por un cambio de rumbo: Amazon impulsa Alexa+ con inteligencia artificial de última generación, un modelo de negocio revisado y un despliegue que, por ahora, no ha sido tan fluido como se esperaba.
En el horizonte inmediato se combinan tres grandes titulares: una posible cuota mensual para no usuarios Prime, la introducción de publicidad integrada en la experiencia y un estreno con fallos que Amazon atribuye a ajustes iniciales.
Qué es Alexa+ y qué promete aportar
Alexa+ se presenta como una evolución con IA generativa capaz de ofrecer respuestas más naturales, mantener conversaciones con mayor contexto y reforzar su papel como cerebro de la casa conectada.
Su meta principal es competir de tú a tú con ChatGPT y el renovado Google Assistant, elevando el listón en comprensión del lenguaje, orquestación de dispositivos y calidad de las interacciones.
El plan contempla establecer a Alexa+ en el centro de la experiencia doméstica, desde la interacción por voz hasta la automatización, con una capa de IA que reduzca fricciones y amplíe los casos de uso diarios.
Precio, suscripción y nueva vía para rentabilizar Alexa
El uso de la Alexa clásica se mantiene sin coste; sin embargo, Amazon plantea que Alexa+, con funciones avanzadas, tenga una cuota de 19,99 USD al mes para quienes no son miembros de Prime.
Después de años en los que el asistente, pese a su popularidad, no ha logrado monetizarse al nivel deseado, la compañía busca ahora un equilibrio entre valor añadido y un ingreso recurrente que justifique la inversión en IA.
Andy Jassy, CEO de Amazon, ha insinuado la posible introducción de anuncios “sutiles” durante las interacciones: recomendaciones que no alteren la naturalidad ni degraden la experiencia del usuario.
Un arranque con tropiezos que Amazon atribuye a ajustes
Los primeros días estuvieron marcados por fallos de conexión, respuestas más lentas de lo esperado y una experiencia irregular que frustró a parte de los usuarios iniciales.
Amazon ha señalado que se trata de “ajustes iniciales” y promete realizar iteraciones rápidas para estabilizar el servicio, aunque en un mercado con poca paciencia, esa primera impresión resulta crucial.
En un servicio que busca competir con los mejores, la latencia y la fiabilidad son prioridades clave para recuperar la confianza compartida por los usuarios.
La competencia observa: el papel de Siri y el resto del sector
Mientras Amazon avanza, Apple opta por un ritmo más pausado en la próxima actualización de Siri, perfeccionando su IA generativa y aprovechando la integración en su ecosistema.
Este enfoque más conservador puede brindarle ventaja si Alexa+ se lanza como una “beta pública”: Apple gana tiempo para perfeccionar su tecnología y presentarla cuando la fiabilidad sea mayor.
Para Amazon, resulta esencial demostrar que puede mejorar rápidamente, integrando la publicidad sin fricciones y convenciendo a los usuarios de que la nueva capa de IA aporta utilidad diaria.