Los robots humanoides han dejado de ser una promesa lejana para asomar en tareas del hogar, fábricas, aulas e incluso en el ámbito clínico. El sector avanza en paralelo en capacidades físicas y de inteligencia, y empieza a mostrar usos que van más allá del laboratorio.
En los últimos meses hemos visto demostraciones con impacto real: un androide que ayuda con la colada, otro que se matricula en un doctorado, nuevos operarios para logística, una megatienda que vende humanoides con servicio integral y plataformas más asequibles para investigación. El mapa se completa con propuestas que miran al quirófano y con apariciones culturales que normalizan su presencia.
Aulas y artes escénicas: un alumno no humano en Shanghái
La Academia de Teatro de Shanghái admitió al androide Xueba 01 en su programa de doctorado en Drama y Cine, con especialización en diseño digital de artes escénicas y foco en la ópera tradicional china. Según Shangguan News, es la primera vez que un humanoide cursa estudios avanzados junto a estudiantes humanos, con el inicio de clases previsto para el 14 de septiembre.
Xueba 01 mide 1,75 m, pesa 30 kg, puede caminar seis horas seguidas, generar más de 100 expresiones faciales y modificar altura y apariencia para encarnar personajes. Con cámaras integradas en los ojos, interactúa en tiempo real con el público. El robot recibió su carta de aceptación durante la World Artificial Intelligence Conference y contará con la profesora Yang Qingqing como mentora; deberá asistir a clases, ensayar y presentar tesis como cualquier alumno.
La iniciativa ha generado un debate académico: estudiantes se preguntan si un robot puede captar la riqueza emotiva de la ópera, mientras el propio Xueba 01 bromea con su destino en caso de fracasar. La institución defiende el proyecto como un experimento pedagógico que busca explorar el “mundo espiritual” del robot y los límites de la creatividad en la interacción humano‑máquina.
Logística y fábricas: nuevos operarios bípedos
Shanghái Electric presentó SUYUAN como operario logístico humanoide durante la conferencia mundial de IA de finales de julio. Dotado con 38 grados de libertad y un “cerebro” de 275 TOPS de cálculo, combina visión binocular y sensores LiDAR para medir distancias, mapear espacios en 3D y ejecutar tareas en tiempo real con fluidez.
En una demostración pública, SUYUAN reconoció, seleccionó y distribuyó cajas de distintos tamaños. Sus especificaciones buscan encajar con el entorno humano: 167 cm de estatura, 50 kg de peso y velocidad de desplazamiento cercana a 5 km/h. Entre las limitaciones actuales, su brazo no levanta más de 2 kg ni transporta más de 10 kg, pero ilustra un salto cualitativo hacia la automatización bípeda en logística.
China concentra gran parte del impulso del sector con humanoides en espacios públicos, desde paseos en centros comerciales hasta modelos de coste contenido como los de Unitree. Este ritmo de iteración acelera el paso de los prototipos a entornos reales y alimenta una cadena de suministro local enfocada en humanoides.
Sanidad en el horizonte: ayuda humanoide para el quirófano
En un artículo de perspectiva en Science Robotics, el investigador Michael Yip señala que los robots quirúrgicos actuales son caros, especializados y operados por médicos altamente cualificados, y que las mejoras recientes en IA aún no se han trasladado plenamente al quirófano. Además, la creación de grandes conjuntos de datos médicos plantea retos de privacidad y costes.
La propuesta pasa por incorporar a la cirugía factores humanoides de propósito general, con brazos y manos multidedo, capaces de sostener una sonda de ultrasonido, manejar una cámara endoscópica o actuar como instrumentistas manteniendo el campo estéril. Serían tareas de bajo riesgo y alta carga física donde estas máquinas descargarían al personal.
A largo plazo, a medida que los humanoides industriales aprendan habilidades diversas con modelos de base y datos no clínicos, parte de ese conocimiento podría trasladarse al entorno sanitario. No es un salto inmediato, pero el potencial para aliviar la escasez de profesionales es un vector claro de interés.
Mercado y ecosistema: de los laboratorios a las tiendas 4S
Pekín ha estrenado Robot Mall en Yizhuang, una megatienda “4S” para humanoides (venta, repuestos, servicio y feedback). Abierta el 8 de agosto y repartida en cuatro plantas, reúne categorías que van de robots médicos a bípedos y con ruedas, con demostraciones inmersivas, diagnóstico remoto, reposición de piezas y salas para acuerdos B2B. Los precios arranca alrededor de 2.000 yuanes y escalan hasta cifras de seis o siete dígitos, con instalación y formación incluidas.
Con 556.000 robots industriales fabricados en 2024 y cerca de dos tercios de las patentes de robótica mundiales, China impulsa un ecosistema que saca los humanoides del laboratorio a escenarios reales. Los promotores ya anuncian una versión 2.0 con más escenarios y fabricantes.
En el terreno de las plataformas, LimX Dynamics presentó LimX Oli, un humanoide de 1,65 m y 55 kg con 31 grados de libertad, IMU de seis ejes propia, cámara Intel RealSense y cámara industrial de alta resolución. Su SDK en Python y compatibilidad con MuJoCo, Isaac Sim o Gazebo facilitan la investigación y la docencia, y su diseño modular permite sustituciones rápidas; el precio de entrada ronda los 158.000 RMB (unos 21.800 dólares).
La normalización también llega por la vía cultural: se han celebrado eventos deportivos con humanoides, un robot de secundaria cruzó el escenario para recoger su diploma y Adam, de PNDbotics, debutó como intérprete de keytar en el festival VOYAGEX. Este último emplea aprendizaje por refuerzo entrenado en simulación, con entre 25 y 44 GDL y una biomecánica inspirada en la pelvis humana.
En paralelo, actores globales como Tesla Optimus han mostrado nuevas destrezas domésticas gracias a avances en entrenamiento, alimentando una competencia que acelera el salto de los prototipos a productos con utilidad concreta.
El panorama que dibujan estas piezas es el de una robótica humanoide más capable y ubicua: desde un asistente que ayuda con la colada hasta un estudiante de doctorado, un operario de almacén o un apoyo en el quirófano. La apertura de tiendas 4S, el empuje de plataformas asequibles y la integración con modelos VLA sugieren que la siguiente fase consistirá en afinar la fiabilidad, reducir costes y facilitar su incorporación en rutinas cotidianas con beneficios medibles.