Purgar los radiadores es una de esas tareas que nunca me salto cada año, justo antes de empezar la temporada de calefacción. Es algo sencillo, pero muy útil para que funcionen mejor y consuman menos. Aun así, antes de hacerlo conviene prestar atención a algunas señales que indican que ha llegado el momento de purgarlos.
Hay pistas bastante claras que te avisan de que un radiador necesita una buena purga, y lo mejor es no pasarlas por alto. Si no lo haces, puede que el radiador no caliente correctamente y acabes gastando más energía de la necesaria. Si quieres saber si es tu caso, te cuento cómo detectarlo fácilmente.
Normalmente, lo primero que se nota es que el radiador no calienta de forma uniforme. Si al tocarlo ves que la parte de arriba está fría y la de abajo caliente, o simplemente notas zonas con distinta temperatura, ahí tienes la primera señal de que hay aire acumulado en el interior. Y cuando eso pasa, el agua caliente no circula bien, haciendo que el calor se reparta mal por toda la casa.
Si al tocarlo notas que la parte de abajo está caliente pero la de arriba está fría, casi seguro que hay aire acumulado en su interior. Ese aire impide que el agua caliente circule correctamente, y por eso no se calienta toda la superficie.
Otro síntoma muy típico son los ruidos extraños, como borboteos. Si escuchas burbujeos, gorgoteos o chasquidos mientras la calefacción está encendida, lo más probable es que haya burbujas de aire atrapadas en el circuito. Es un sonido inconfundible y suele desaparecer justo después de purgar el radiador.
En casas de más de una planta también se puede comprobar. También puedes darte cuenta si tu casa tarda más de lo habitual en calentarse o si algunos radiadores funcionan bien y otros apenas emiten calor. En ese caso, el aire suele concentrarse en los puntos más altos del sistema, reduciendo la eficiencia de toda la instalación.
Por último, si has hecho mantenimiento reciente (limpiando el circuito) o has rellenado de agua el circuito de la caldera, es normal que entre algo de aire. En esos casos, conviene purgar todos los radiadores preventivamente, aunque parezcan funcionar bien, para mantener la instalación equilibrada y evitar problemas mayores.
Cómo purgar los radiadores
En los radiadores podemos encontrar dos tipos de purgadores, y lo primero es saber cuál tienes instalado en tu sistema de calefacción. Por lo general, pueden ser automáticos o manuales, y es importante conocer el tipo antes de empezar.
Los purgadores automáticos no necesitan que hagas nada: ellos mismos se encargan de expulsar el aire acumulado. En cambio, si tu sistema usa purgadores manuales, tendrás que hacerlo tú mismo, aunque el proceso es sencillo y no requiere herramientas complicadas. Si es tu caso, te cuento los pasos que sigo para purgar correctamente los radiadores de casa.

Un tipo de purgador que se puede abrir con la mano
Lo primero es dejar que la caldera se enfríe por completo. Es fundamental trabajar con el sistema apagado para evitar quemaduras y asegurarte de que el agua no esté circulando. Lo ideal es esperar entre dos y cuatro horas desde que apagas la calefacción. Luego puedes tocar la parte superior del radiador para confirmar que está fría.

Con este tipo, para abrirlo hace falta un pequeño destornillador
Después llega el momento de abrir la válvula de purgado. Coloca un recipiente o cubo debajo y gira la llave con cuidado. Al principio notarás que sale aire acompañado de unas gotas de agua; al cabo de unos segundos, el flujo se volverá más constante. Espera hasta que solo salga agua de forma continua, sin burbujas ni ruidos.

Llave de llenado de la caldera
Para terminar, revisa la presión de la caldera. Echa un vistazo al manómetro: lo normal es que marque entre 1 y 1,5 bares. Si la presión está por debajo, abre con cuidado la llave de llenado (suele ser una pequeña tuerca roja o azul en la parte inferior) y deja que suba poco a poco hasta alcanzar el nivel adecuado. En cuanto llegue, ciérrala bien para evitar pérdidas.

Comprobar la presión de la caldera
Con todo esto, tus radiadores quedarán purgados y listos para funcionar de forma más eficiente, sin ruidos ni zonas frías. Un gesto sencillo que mejora el confort en casa y te ayuda a ahorrar energía durante el invierno.
Foto de portada | Cottonbro studio
En Xataka SmartHome | La OCU y los expertos lo dejan claro: así debes purgar los radiadores si no quieres averías ni riesgos al encender la calefacción
–
La noticia
Así te avisa tu radiador que debes purgarlo: estos son los síntomas en los que debes fijarte
fue publicada originalmente en
Xataka Smart Home
por
Jose Antonio Carmona
.


